Tú.

Porque... si eres tú, sólo si eres tú, todo vale, nada más importa.

Locuras impensables que no aceptaría bajo ningún concepto, si eres tú quién lo pide mis defensas se derrumban, mis principios se destruyen, hago cualquier cosa.

¿Maldito, qué me has hecho?

No debería ser así, pero supongo que es cosa de tu magnetismo natural, de que no soy capaz de resistirme si eres tú quién me está mirando, de que el simple hecho de que seas tú puede lograr que yo sea cualquier cosa.

Esto no te lo perdono, mi vida era más sencilla, y podría ser más feliz si tú... En cuanto te tenga cerca te devoro. Tenlo claro.

Realidad paralela... me gusta más la segunda que la primera, prefiero no despertar de este sueño, mi mundo sin ti, no tiene sentido.

Por ser tú, no sirven excusas, no sirve nada más. Tú. Sólo tú.