lunes, 9 de diciembre de 2013

Estoy loca.

Si cambié mi vida por ti, ¿qué importa arriesgarse un poco más?

Si tenerte cerca me hace feliz, ¿por qué evitarlo?

Si adoro ver tu sonrisa, estar contigo, hablar contigo... ¿por qué esconderme?

He decidido tomar las riendas de mi vida. Voy a ser egoísta y voy a pensar en mi. Dejaré las aguas correr naturalmente. Sin prisas, sin presiones, sin carreras de fondo... ¿quién sabe lo que puede pasar? Yo creía que estábamos destinados a no ser, pero tal vez fue que nos conocimos en el momento y en el lugar equivocado. Así que he decidido que quiero volverte a conocer. Porque fuiste un huracán que barrió mi vida y no creo que deba ignorar tan fácilmente algo tan fuerte.

O tal vez vaya de cabeza al precipicio. Pero yo soy de las que arriesgan, y puestos a sufrir... ¿qué más da cuál sea el motivo?

Lo único que sé es que no soporto echarte de menos. Que eres parte de mi vida, que no quiero que estés fuera de ella. Que puede que no te conozca, que me comporte de forma irracional... pero lo único que tengo claro es que no quiero separarme de ti.